(Y QUE ESTUVIERON Y ESTÁN AL ALCANCE DE CUALQUIERA...)
Ficha de entrada
-
Tema: recopilación de 10 documentos clave (hay más) que demuestran que mi padre NO fue secretario del consejo de guerra de Miguel Hernández ni intervino en la sentencia.
-
Objetivo: mostrar de forma irrefutable que el bulo se construyó ignorando voluntariamente la documentación oficial.
-
Autor del bulo: Juan Antonio Ríos Carratalá
-
Material: archivos militares, expediente MH, sentencia 311/2021, documentos notariales, certificaciones.
DIEZ PRUEBAS DOCUMENTALES IRREFUTABLES
A continuación, diez pruebas que cualquier periodista, historiador o catedrático serio debería haber consultado antes de publicar nada.
El bulo, en su conjunto, es mucho mayor, no se limita a que mi padre fuera secretario de un consejo de guerra o que pidiera penas para nadie. Ha reescrito su vida por completo...
No son opiniones.
No son interpretaciones.
Son documentos oficiales del Estado español (y es el testimonio de los que convivieron con él y lo conocieron de verdad, no sólo de su familia...)
PRUEBA 1 — Firma del verdadero secretario judicial del consejo de guerra
📄 Documento: Acta original del consejo de guerra de Miguel Hernández (Archivo General y de Defensa).
Demuestra que:
-
El secretario judicial del consejo de guerra fue José María X. (apellido ilegible), no mi padre.
Destruye: -
El titular “Baena, secretario que condenó a MH”.
Por qué no la citaron: -
Porque invalida todo el relato de Ríos Carratalá en un solo golpe.
PRUEBA 2 — Relación oficial de participantes del consejo de guerra
📄 Legajo completo del proceso 21.001.
Demuestra:
-
Listado oficial: presidente, vocales, fiscal, defensor, secretario.
-
En ningún documento del consejo de guerra propiamente dicho aparece Antonio Luis Baena Tocón.
Destruye: -
Toda afirmación sobre su presencia en la sala o intervención procesal.
No la citaron porque: -
Contradecía directamente el relato ideológico.
PRUEBA 3 — Sentencia 311/2021 del Juzgado Contencioso de Alicante
📄 Documento firme en derecho.
Demuestra:
-
“El Sr. Baena Tocón NO formó parte del consejo de guerra”.
-
“NO pidió pena alguna para el poeta”.
-
“La atribución es ERRÓNEA”.
Destruye: -
El núcleo del bulo.
No la citaron porque: -
Obliga a rectificar públicamente.
PRUEBA 4 — Expediente militar completo de Antonio Luis Baena Tocón
📄 Archivo Militar de Segovia y documentos ministeriales.
Demuestra:
-
Su destino era administrativo, no judicial.
-
Cumplía servicio militar obligatorio.
-
No tenía rango ni funciones decisorias.
Destruye: -
La imagen de “hombre duro” o “represor profesional”.
No la citaron porque: -
No encaja con el estereotipo que se pretendía construir (además de haber sometido a ficción ideológica e interesada su expediente).
PRUEBA 5 — Documento que acredita la firma de José María X. en el consejo de guerra
📄 Actas del proceso 21.001.
Demuestra:
-
Coherencia absoluta: un solo secretario en el proceso del consejo de guerra.
Destruye: -
La frase “firmó documentos del proceso” atribuida por Ríos a mi padre no especifica intencionadamente que se deben a diligencias administrativas previas.
No la citaron porque: -
Es una prueba de hierro que desmonta a Ríos palabra por palabra y es por lo que necesita hacer hipótesis de ficción tendenciosas.
PRUEBA 6 — Constancia archivística del destino real de mi padre: Sección de Plana Mayor
📄 Documentación de destinos administrativos.
Demuestra:
-
Mi padre NO trabajaba en Consejos de Guerra.
Destruye: -
La supuesta “vinculación directa” con la condena.
No la citaron porque: -
La palabra “vinculación” sonaba mejor que la palabra “archivo”.
PRUEBA 7 — Salvoconducto firmado por Luis Jiménez de Asúa (1936)
📄 Documento histórico familiar y político.
Demuestra:
-
Mi padre fue víctima de la violencia miliciana de la República (y su familia), a pesar de ser su padre fiel funcionario a la misma
Destruye: -
El estereotipo del “joven represor” en la guerra y posguerra inmediata.
No la citaron porque: -
Hubiera reventado el relato moral construido contra él.
PRUEBA 8 — Reconocimiento oficial de mi abuelo como víctima de la Guerra Civil (Ley de Memoria Democrática)
📄 Resolución del Ministerio de la Presidencia.
Demuestra:
-
Que la familia Baena fue víctima directa de la violencia en 1936.
Destruye: -
El marco ideológico en el que pretendían insertar a mi familia.
No la citaron porque: -
Hubiera obligado a narrar una historia verdadera, más compleja y humana. No obstante, se solicitó a instancias de las falsedades emitidas por el catedrático Ríos Carratalá
PRUEBA 9 — Pruebas periciales presentadas en juicio civil (2024)
📄 Informes periciales de frecuencia y difusión de titulares.
Demuestra:
-
Más de 1.000 publicaciones falsas replicadas sin contraste.
Destruye: -
La defensa de los medios basada en “solo publicamos dos veces” (Se contradicen y negando lo que hicieron con lo que está peritado por persona/entidad acreditada en cuanto a cantidad de publicaciones y repercusión mediática).
No la citaron porque: -
Demuestran responsabilidad objetiva prolongada en el tiempo.
PRUEBA 10 — Correspondencia y comunicaciones del propio Ríos Carratalá
📄 Emails donde admite retirar textos y promete contrastar.
Demuestra:
-
Que el catedrático sabía que algunas de sus afirmaciones eran problemáticas y veraces sólo en su interesada ficción.
-
Que prometió verificar/retirar datos (y no lo hizo), porque lo que había hecho y difundido era mucho más que por lo que se le reclamaba y retiraba voluntariamente en un principio, pretendiendo engañar al reclamante (yo), de manera engañosa, pues lo incorporaría de nuevo, ejerciendo campaña falsa de lo que se le requirió en medios, dando lugar a la censura de quien le reclamaba veracidad, alegándole falsedades para defender su deshonesta actuación, impropia a mi parecer de un historiador auténtico que se precie.
Destruye: -
Su imagen de “académico riguroso y documentado”.
No la citaron porque: -
Lo deja en evidencia directamente (rigor para hacer ficción y manipular documentos de manera ideológica e interesada).
Conclusión:
Estas diez pruebas desmontan por completo la atribución falsa.
No lo digo yo.
Lo dicen:
-
los archivos,
-
los expedientes,
-
las sentencias,
-
las firmas,
-
las periciales,
-
los reconocimientos oficiales,
-
y los propios documentos de Ríos.
Cualquier persona profesionalmente honesta y mínimamente rigurosa habría rectificado.
Los medios habrían pedido disculpas.
La Agencia EFE habría retirado sus teletipos.
La SER habría revisado sus entrevistas (fueron más de una y prolongadas en el tiempo).
Y el catedrático habría admitido su error.
No ocurrió.
Pero aquí queda el dossier definitivo.
El que ellos nunca quisieron mirar.
El que mi padre merecía desde el principio.
Crea tu propia página web con Webador